Conozca Nuestra Historia

Sobre Este Espacio

La voz Tubanera abre un espacio para ir publicando algunos personajes que de una manera u otra hicieron historia en nuestro pueblo y que su vida es desconocida por las generaciones más jóvenes.

Nos referimos a esas personas cuyos nombres llevan calles, o instituciones, o aulas de las escuelas de nuestro municipio.

Desarrollaremos este espacio en la medida de lo posible, es decir, hasta donde podamos investigar con cierto grado de fiabilidad y mientras encontremos personas que nos puedan ofrecer las informaciones pertinentes.

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miércoles, octubre 12

Rafaela Gladys Moreno de Aristy

 


(La Maestra) 1930- 20011

Nació en Padre Las Casas, hija de los señores Gerardo Bobadilla y Leonaldina Moreno.

Desde muy pequeña ayudaba a su madre en la panadería, en donde se hacìa todo lo fuera con harina; galletas, masitas, tortillas, cazabe, biembezabe, bizcocho…, en fin, todo lo que en esa época se pudiera hacer con harina y en un horno de tierra. Así nació su amor por los negocios. Siempre quiso ser independiente y administrar su propio dinero. Siendo muy joven, hasta iba en burro a vender a diferentes localidades de Padre Las Casas.

La Comerciante

Cuando se casó con Constantino Aristy (Cantino), juntos pusieron un colmado en la Calle 30 de Marzo, esquina Restauración (próximo al mercado). No tenía nombre oficial; la gente lo llama “el colmado de Gladys” o “el colmado de Cantino” A medida que el colmado iba creciendo en clientela, asi tambièn crecìa la diversidad de la mercancia, y se llegó a vender de todo lo que se comprara; desde cristalería, plásticos, ropa, tela cerones… Si existìa, Gladys lo vendìa. 

Algunos recuerdan a Gladys como una comerciante, astuta e intelligente, en el sentido de que siempre tenía los productos que los clientes requerían, por raro o sencillo que pareciera, especialmente para los  agricultores, y moradores de las zonas aledañas. Por eso hizo una gran clientela. Si alguien necesitaba algo que no había en el pueblo, iba a donde Glads y ella lo traía de la Capital.

Como en todo negocio, hubo tiempos buenos y tiempos malos. En un tiempo en que el negocio pasaba por una crisis, para no dejarlo caer, Glads se iba a vender en una camioneta que habìan adquirido a los campos aledaños. Así le dio impulso y un nuevo enfoque al colmado.

Visionaria en los negocios, el colmado fue trasladado de la calle 30 de Marzo a la calle Duarte, justo frente a la rotonda del  Higo, porque ahí era más visible para todo el que bajaba de los campos. Por eso, el negocio se mantuvo por más de 6 decadas. En la historia de Padre Las Casas, este comlmado se encuentra entre los más viejos y grandes del municipio.

Gladys fue una destacada negociante nata. Tanto así, que su su sobrino Mon Canó (q.e.p.d.) le puso el mote de  “la marchanta”  porque para ella no existía frontera que le impidiera hacer negocio y llegar con su mercancía a cualquier lugar.

En la política

  • Perteneció al entonces Partido Revolucionario Dominicano (PRD) desde el mismo inicio de esta organización política.
  • Durante mucho tiempo, fue miembro del Comité Municipal del PRD, ocupando diferentes posiciones en el comité.
  • Fue regidora de la Sala Capitular, del 1994-1998 (cuando Ramón Santana era alcalde.
Fue perredeista de por vida, y opositora abierta al régimen existente en esa época (los llamados 12 años de Balaguer). Se mantuvo siempre fiel a los lineamientos de su partido e inmovible en sus ideales.

Una de las versiones del apodo de “la maestra”, por el cual era Gladys conocida, dice ser de origen polìtico. En las reuniones, en los momentos más difíciles, ella salía con ideas brillantes o iluminadoras que ayudaban a solucionar la situación del momento. De ahì alguien saliò con que era una maestra, y se le quedó La Maestra

La mujer humanitaria

Sin alarde y sin ostentación, ayudaba a muchos necesitados discretamente. Contribuía con los que en ese tiempo era prioridad: pagar una receta médica, comprar los alimentos básicos, y ayudar a jóvenes con los estudios, entre otras cosas.

Està, por ejemplo, Diòmedes Fèlix Sanchez, conocido como Alemán, quien al ver Gladys que era un joven trabajador, serio, y con ganas de superarse, le tomó mucha confianza y lo ayudó a salir adelante. Le compró tres guaguas y un apartamento en La Capital, y le puso dinero en el banco para que pudiera ir a pedir visa para viajar. 

Otros jóvenes que cabe mencionar fue Victor Manuel Abreu, alias “Victor Chuflai”, a quien ayudó con una camioneta para que trabajara; y a Esteban Segura, en Guayabal, a quien le puso un negocio.

Aunque nunca tuvo hijos propios, fue una madre para otros. Adoptaron una niña, Mélida, y acogió en su casa a muchos jóvenes, a quienes ayudó enseñándoles a trabajar, con los estudios, o de otras maneras. Entre los jovenes que podemos recordar se encuentra Chocha, Chico, el Rubio (al que le decían "el rubio de Cantino"), Moreno Beltré, Luisa, Ibelise Belkis Delgado, Verdura, Chaguito, Casimiro, y “Rola”.

De las personas que mantuvieron una relación de cariño y respeto con Gladys cabe destacar a Xiomara Beltré Severino (Ñaño), junto con su mamà y su hermana, Bianela Severino y Belkis. Aunque no vivían con Gladys, eran como parte de la familia. Se mantuvieron a su lado, pendientes de su salud (era diabética al punto de quedar ciega) y la de Cantino, hasta que ambos murieron bajo su protección y cuidados. Xiomara, especialmente, fue como otra hija para ambos; tanto en la salud como en la enfermedad, fue su apoyo y confianza. Gladys y Cantino le correspondieron de la misma manera.

Otra labor en la que se destacó Gladys fue la construcción de casas. Construyó, más o menos, 15 casas, las cuales alquilaba a precios irrisorios. Se sabe de ella que era la que mas barato alquilaba sus casas, y que los inquilinos pagaban según sus entradas económicas: lo que pudieran y cuando pudieran. Muchos de ellos le quedaron debiendo un año o màs de alquiler; otros nunca le pagaron porque no tenìan con què. Tanto así, que cuando iba a cobrar el alquiler y veía la condición en que vivìan, les decìa, “déjelo para después que yo sé que la cosa està mala”.

La otra versiòn del apodo de “la maestra” viene de la albañilerìa. Dìcese que Gladys siempre estaba presente en cada construcción de sus casas vigilando que las cosas se hicieran como ella querìa, diciendo dònde poner un clavo, una tabla, còmo hacer esto o aquello… ordenando qué hacer y cómo hacerlo. Por eso los mismos trabajadores le pusieron el mote de “La Maestra.”

Austera para con ella misma (de un cigarrillo fumaba varias veces) pero no para los pobres, o para el que quería trabajar. A estos los ayudaba a poner un negocio, o a comprar una guagua; les conseguía una mejora, o lo que hiciera falta para facilitarles la vida.

De apariencia sencilla y humilde, se codeó con grandes figuras políticas de su época. Nunca hizo alarde de su posición económica y no le gustaba vertirse ostentosamente ni usar joyas. Incluso, llegó a ser criticada por su forma de vestir, llegando a ser catalogada por algunos como que “era una pobre rica”.

Anécdotas

Gladys viajaba frecuentementea y Tomás, el esposo de Belkis, era quien la llevaba y traía. Cuando se puso de moda el merengue “Abusadora" (¿que  hiciste abusadora, qué hiciste?), Tomás lo ponía a sonar desde que salía de Padre Las Casas hasta que llegaba de nuevo. Gladys ya estaba harta de oir el mismo merengue todo el santo día, pero por educación y respeto no decía nada. Hasta que un día, cuando a Tomás le robaron la música de la guagua, Gladys dijo "¡ay, *&*$&#@%*, por fin se llevaron la abusadora!

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Una vez, en una tienda con Belkis, Gladys vió un maniquí prieto. Pensando que era un haitiano, se puso a buscarle conversación para traerselo a trabajar con ella. Al ver que "el haitiano" no le contestaba, le dijo a Belkis, "¡pero el haitiano no habla!" [Y aunque usted no lo crea, es cierto].

Legado

Falleció bajo los cuidados y atenciones de Ñaño y la familia Beltré Severino, el 11 de marzo de 2011. Sus restos descansan al lado de su esposo en el Cementerio Municipal de Padre Las Casas.

Nos deja Gladys un ejemplo de entereza, integridad, y honradez, tanto en el campo comercial y político como en su vida personal. Es por eso que el nombre de Rafaela Gladys Moreno de Aristy (La Maestra) ocupa un lugar en la historia del municipio de Padre  Las Casas.

Fuentes: Profesor Nápoles Sánchez Amancio, el señor Amado Vargas, Belkis Beltré, y Ñaño Beltré.



Constantino Aristy, esposo de Gladys



Gladys (centro), 
firmando el acta de juramentaciòn como regidora del Ayuntamiento, 1994


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